Consumo de pescado y contaminación de las aguas
Poblaciones con un alto consumo de pescado, como los nativos procedentes de Alaska, los esquimales de Groenlandia o los japoneses que vivían en pueblos costeros, tuvieran bajas tasas de Enfermedades Cardiovasculares (ECV) ayudó a generar la hipótesis de que el consumo de pescado puede proteger frente a la arterosclerosis.
¿Por qué los dietistas nutricionistas recomiendan consumir pescado al menos 2 veces a la semana?
Un consumo moderado de pescado, de aproximadamente 2 veces a la semana, especialmente pescado azul, tal como salmón, sardinas, trucha, atún blanco, anchoas o arenques, rico en ácidos grasos omega-3, reduce el riesgo de enfermedad coronaria. Sin embargo, mayores consumos no parece que aumenten aún más el beneficio de la protección. Un meta-análisis también observó que comer pescado entre 2 a 4 veces a la semana reducía el riesgo de ictus en un 6% (RR: 0,94; IC al 95%: 0,90-0,98)16.
Hay evidencias que sugieren que los problemas con los contaminantes orgánicos persistentes, como las dioxinas o los bifenilos policlorados, pueden reducir los beneficios cardiovasculares. Se considera que el metilmercurio consumido a través del pescado tiene una influencia indetectable en la incidencia de eventos cardiovasculares. Por lo tanto, los beneficios de un consumo moderado de pescado son mayores que los riesgos debidos a su posible contaminación. Para las mujeres embarazadas se recomienda el consumo de 2 a 3 veces a la semana de pescado bajo en mercurio, es decir, evitar en la medida de lo posible las grandes especies como pez espada, caballa, atún.
Consumir pescado de piscifactoría o salvaje
Otra cuestión a resaltar en cuanto al consumo de pescado se basa en su procedencia: salvaje o procedente de piscifactorías. En el caso del salmón, se ha observado que los beneficios para la salud son similares en ambas opciones. De hecho, el informe científico en que se basó la Guía Dietética para los Americanos 2015-2020 concluyó que no había diferencias en cuanto a calidad nutricional entre el pescado salvaje y el de piscifactorías. En todo caso, sería interesante conocer si esta conclusión se mantiene evaluando distintos países y condiciones ambientales de las piscifactorías.
Para una buena salud es necesario incluir el consumo e pescado en al dieta de forma regular. Si no te gusta el pescado, te animamos a consultar con los dietistas nutricionistas de Centro Médico Sanugal, te indicarán platos ricos, saludables y económicos con los que disfrutarás del pescado.
Fuente: Nutrición en Salud Pública – Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.