Tras el verano, el 75 por ciento de las patologías que se tratan en nuestra consulta de podología están relacionadas con el abuso de las chanclas, los zuecos y otros calzados inapropiados. Las dolencias más comunes son los dolores en el tobillo, la planta del pie, el empeine y el arco interno del pie. La deshidratación y problemas en las uñas, son otras  de las alteraciones típicas en las consultas de podología tras las vacaciones de verano.

Lo mejor es no olvidarse de algo tan obvio como es que tras el verano llega el otoño e ir preparando los pies para la nueva estación. Lo ideal es empezar esa preparación con una visita al podólogo para una revisión y realizar una quiropodia,  eliminar durezas, tratar las uñas y talones, que son los que más sufren en verano. Acudir al podólogo tras el verano es especialmente importante en personas diabéticas, que  al padecer neuropatías y tener dificultad de cicatrización, deben ser controladas para impedir que cualquier rozadura o impacto en el pie derive en una úlcera.

Antes de volver a usar calzado cerrado, nuestra podóloga, Lucía Fernández, nos invita a seguir los siguientes consejos para que los pies sufran lo menos posible:

  • Hidratarlos adecuadamente para evitar la aparición de ampollas, grietas y sequedades, especialmente en el talón.
  • Secarlos cuidadosamente. El exceso de humedad provoca múltiples problemas en los pies, por lo que deben secarse minuciosamente, prestando especial atención al espacio interdigital, para evitar la aparición de hongos y bacterias.
  •  Escoger correctamente los calcetines. Éstos deben ser de fibras naturales, permitir una transpiración correcta al pie y no apretar en la parte alta para evitar problemas circulatorios.
  • Revisar las plantillas del interior del calzado. Cuando los zapatos permanecen guardados varios meses, es posible que las plantillas se hayan resecado por la sudoración y estén desgastadas o rotas. En el caso de que el calzado se encuentre en buen estado, se recomienda cambiarlas por si hubieran aparecido hongos o generaran molestias al caminar. Además, hay que revisar las suelas y cambiar las tapas, si están deterioradas, para que el calzado no sufra por el desgaste de las mismas.

Si tienes cualquier duda sobre el cuidado de tus pies, solo tienes que llamarnos al 988370266.